A.
¿Qué es la comunicación social?
B.
Funciones de la comunicación radiofónica
C.
Características específicas del medio
radiofónico
A. Conceptos
relativos a la audiencia
B. Factores
de segmentación de la audiencia potencial
C. Factores
variables de la audiencia potencial
D. Móviles
de la audiencia
A. Programa
informativo
B. Programa
de variedades (magazine)
C. Programa
musical
D. Programa
deportivo
E. Programa
dramático
F. Programa
cultural
G. Radio
servicio
A. La
música
B. Los
efectos
C. Los
silencios
D. La
palabra
D.
¿Qué es la comunicación social?
Es una transmisión pública de
mensajes, indirecta y unilateral realizada por medios técnicos y
destinada a un público disperso o colectividad.
Es pública pues no está
dirigido a un grupo delimitado, y se pretende que el mensaje llegue al mayor
número de posibles oyentes. Sin embargo, la radio genera unas condiciones de
una escucha que habitualmente es individual, de tal forma que el oyente cree
tener la apariencia de privacidad con el locutor, llegando a tener
confianza incluso para ponerse en contacto con él telefónicamente. Tal cercanía
viene propiciada, por ejemplo, con el tuteo del locutor.
Es indirecta porque no se
establece cara a cara, existe una distancia entre el emisor y el receptor. A
diferencia de la prensa que necesita un medio físico material y la televisión
que es necesaria la vista, hace de la radio el medio mas parecido a la
comunicación directa (boca a oído) y el oyente olvida que se dirigen a él a
través de un medio técnico.
Es unilateral aunque es el
medio donde más se da el intercambio de papeles entre emisor y receptor, pues
propicia mayor grado de participación del oyente.
E.
Funciones de la comunicación radiofónica
Las funciones básicas
intelectuales son las de entretener, formar, informar y persuadir.
La función persuasiva consiste en
captar la atención del oyente, conseguir que no huya a otro punto del
dial, que permanezca a la escucha. El discurso radiofónico debe hacer uso de
recursos retóricos (repetición, amplificación y apelación directa), que
combinados en adecuada armonía con los efectos, los silencios y la música,
constituyen el arte de la expresividad radiofónica, encaminada a captar la
atención y mantener el interés por la escucha del oyente.
“La radio es distracción,
espectáculo a domicilio, siempre amena pero nunca vacía de contenido”. Los
receptores de los mensajes los perciben como juego, espectáculo y como medio
de evasión. A diferencia de la televisión que necesita una dedicación plena
de todos los sentidos, la radio es compatible con todo tipo de situaciones
diarias, mientras trabajamos, conduciendo el coche, duchándose, fregando los platos…
lo que a veces imposibilita que tenga un contenido intelectual alto.
La función de formar produce un enriquecimiento y crea
actitudes sociales o políticas, económicas y artísticas. Se detecta en
todos los contenidos de la emisión, aunque está directamente ligado a los
programas informativos.
“Todo lo que se emite por radio es información”, incluso los
programas musicales contienen información, siendo la utilidad de esta
práctica o del interés inmediato. La ventaja con la televisión y la prensa
es su rapidez.
F.
Características específicas del medio
radiofónico
Creación: Lo que se escucha por
la radio, no es una reproducción de la realidad sino una recreación de la misma
con transformaciones técnico-modales. No se debe utilizar un lenguaje
periodístico como en la prensa, y cambiar el modo de expresarse, pues los
gestos y expresiones corporales no se pueden transmitir como en la televisión.
Actualidad: La sensación de
veracidad de la radio la hace el soporte idóneo para transmitir
información, y origina una imagen actual e informada, pegada a lo cotidiano.
Ejemplo de esto son los enlaces ficticios.
Cotidianeidad: Por un lado puede
convertirse en protagonista principal y diario pues es un medio técnico fácil
de transportar y por otro es compatible con otras actividades diarias.
Diálogo: Con el diálogo la radio
facilita al oyente el acceso a la comprensión de la realidad y le ofrece la
posibilidad de manifestar su opinión sobre los hechos, pudiendo participar en
la programación, siendo a veces un soporte substitutivo del diálogo
interpersonal.
Fugacidad: El oyente no tiene la
posibilidad de detenerse ante una información, analizarla o retroceder como en
la prensa, esto le exige una mayor atención, de ahí que la información ha de
ser hablada como algo vivido y no como una trascripción de la escritura. De
esta forma requerirá un enunciado claro, sin tecnicismos, y con una cierta
repetición de los datos.
Unisensorialidad: Sólo puede ser
percibido por el oído, sin embargo el locutor elige las palabras de forma que
creen las imágenes adecuadas para que el relato sea comprendido. La palabra
sugiere, estimula la imaginación, provoca la creación de imágenes.
E.
Conceptos relativos a la audiencia
Audiencia: Es en términos generales, el conjunto de población
susceptible de recibir los mensajes de los medios de comunicación.
Audiencia potencial: Es la parte de la población capaz o
susceptible de recibir los mensajes de un medio determinado, por hallarse en su
zona de cobertura y por disponer de los medios técnicos necesarios para ello.
Audiencia real: Es el número total de personas que han
recibido un mensaje al menos una vez, a través de uno o varios medios.
Audiencia específica: El total de personas que ha recibido o
recibe los mensajes de un programa o una emisora determinada.
Audiencia útil: La parte de la audiencia específica a la que
atañe un mensaje. Ej. En una publicidad de neumáticos la audiencia útil será la
que posea automóvil.
Audiencia duplicada: Conjunto de personas que han recibido
un mismo mensaje a través de varios medios distintos.
Audiencia acumulada: Número de personas distintas que han
recibido un mismo mensaje a través del mismo medio debido a la emisión sucesiva
de este.
Auditorio: Público efectivo que sigue la emisión en un momento
concreto.
Audiencia activa: Son los oyentes que reaccionan ante la
recepción de un mensaje (feed-back), participan en el programa (teléfono) o
toman decisiones en la programación (correo).
Feed-back: Respuesta que el
receptor de un mensaje da al emisor inicial del mismo. La reacción favorable o
desfavorable puede ser a través del mismo medio o través de otro.
F.
Factores de segmentación de la audiencia
potencial
1)
Geográfico
2)
Edad
3)
Sexo
4)
Educacional y cultural
5)
Lingüístico
6)
Social
7)
Laboral
G.
Factores variables de la audiencia
potencial
1)
Simplicidad técnica: conectar o desconectar son
tareas fáciles y rápidas.
2)
Multiplicidad de oferta: el número de canales de
radio es muy superior a la televisión y cambiar de onda es sencillo.
3)
Actividad compartida: La escucha puede ser
interrumpida con más o menos frecuencia a causa de desplazamientos en la
actividad cotidiana.
4)
Factores estacionales: La audiencia oscila según
la época del año. En L’Alcora en verano bajará mientras que en una población
turística ocurriría lo contrario.
5)
Movilidad social: Los movimientos de población
significan un importante factor de variabilidad.
6)
Factores cronológicos: En España las
oscilaciones son muy ligeras entre lunes y viernes, y en descenso los fines de
semana. A lo largo del día también se registran variaciones, y habitualmente se
concentra por la mañana, y entre las diez y la doce de la noche.
H.
Móviles de la audiencia
1 ¿Por
qué se elige una determinada emisora?
- Por identificación con el estilo o la línea
programática (es seria, cuenta la verdad, da mucha música de calidad).
-Por la calidad de la recepción (se oye
claramente, puedo seguirla con la radio del automóvil).
- Por inercia, una vez aceptada por hábito,
comodidad o pereza.
- Por azar al mover el botón del dial
2 ¿Por
qué se elige un determinado programa?
- Por
su contenido (es interesante, aprendo cosas, habla de asuntos que me atañen.
- Por
su tratamiento (ameno, ágil, profundo, desenfadado)
- Por
identificación con los locutores (simpáticos, convincentes, se expresan bien,
me gusta su voz)
3 ¿Qué
busca el oyente en la radio?
- Compañía
- Información
de noticias del entorno social
- Orientación
para el desarrollo de actividades cotidianas
- Alerta
ante situaciones imprevistas (Ej. estado de carreteras)
- Educación,
formación o enriquecimiento cultural
- Afianzamiento
personal de nuestros puntos de vista
- Entretenimiento
o diversión
- Disfrute
de la música y la palabra
- Expresión
de la opinión personal en programas de participación
Un programa radiofónico es una conjunción
de palabras, músicas, efectos y silencios que se ofrecen al público a través de
las ondas, en forma de una unidad de creación. Un programa es una unidad
informativa formada por un espacio de tiempo, un contenido y un medio
radiofónico de transmisión, que permiten hacer llegar un mensaje idéntico a
infinidad de oyentes.
- Programa
informativo
La característica más destacada de esta clase de programas
está en las noticias de actualidad y forma de ser presentadas. Dentro de éste
destacar algunas especializaciones:
La Noticia – Tiene las características elementales de
veracidad, novedad, actualidad e interés general, así como en su composición a
base de responder a las seis interrogantes de: ¿Quién? ¿Dónde? ¿Qué? ¿Cuándo?
¿Cómo? ¿Por qué?
Se utilizan frases cortas, preferiblemente el presente ha
pasado, y si la noticia es larga se puede arrancar con una entradilla con sus
datos resumidos.
El Flash – Es un adelanto breve de una noticia. Son los
primeros detalles que se conocen de un acontecimiento que posteriormente serán
ampliados.
El Avance Informativo – Intercalado entre dos programas y
siguiendo una puntualidad periódica, da breves detalles sobre las noticias que
mas tarde se tratarán en el programa habitual de noticias.
El Comentario – Tiene que identificarse claramente que se
trata de un punto de vista del comentarista, con su nombre y apellidos. Es una
crítica valorativa o una interpretación documentada de un tema de actualidad.
La Entrevista – Es un diálogo cara a cara en el transcurso
del cual se recaban declaraciones de interés. Para saber mas acerca del
personaje, para saber su opinión acerca
de una noticia o para ampliar una información si el entrevistado está vinculado
a ese tema. Cuando son varias personas entrevistadas toma el nombre de mesa
redonda o de debate.
El Reportaje – Permite la utilización de todos los demás
géneros informativos y su característica es la actualidad. Es una noticia
ampliada que recrea el ambiente y la acción de unos hechos, con presencia de
testimonios y recursos sonoros.
La Rueda Radiofónica – Consiste en la conexión simultánea de
corresponsales o emisoras y encauzada desde el estudio central por un
coordinador.
La Edición Especial – Es un espacio esporádico y
monográfico, dedicado a un acontecimiento poco habitual y extraordinario que
merece la especial atención.
- Programa
de variedades (magazines)
Tocan temas desenfadados, con
ligera profundidad, primando la sonrisa, y potenciando los juegos y concursos.
Sus contenidos persiguen la distracción a todos los niveles, sociales y
culturales, con todo tipo de temas y con entrevistas a famosos.
- Programa
musical
Se ha dicho que “la música es la
reina de la radio”, y se ha merecido la creación de programas individualizados
para ella. Por un lado y gracias a las unidades móviles y al radio-enlace, nos
permiten llegar a actuaciones en directo desde la ópera hasta el más popular
concierto de rock. También música en directo pero desde el estudio de radio,
transmitiendo la pureza de la actuación en vivo ya sea de un grupo o un “disk-jockey”.
Desde la aparición de la música pre-grabada con solo
manipular una pequeña clavija, ha provocado una gran variedad de ofertas con
este tipo de posibilidad, son los llamados “Radio Fórmula”. La especialización,
basada en la forma de presentar y comentar la música, tanto como en el
contenido de la misma música, caracteriza a numerosos programas y a sus
presentadores.
- Programa
deportivo
El tema deportivo estuvo
presente, inicialmente, en los boletines de noticias, pero al ampliarse la audiencia
y el número de nuevos deportes, surgió la necesidad de crear programas
específicos para ellos.
Por un lado están las
retransmisiones en directo y por otro las entrevistas, reportajes y debates,
que sirven como promoción o como vehículo de críticas e informaciones
complementarias.
- Programa
dramático
Las posibilidades de este género
son las retransmisiones desde teatros, retransmisiones de teatro radiofónico,
seriales radiofónicos, y docudramas o reportajes humanos.
- Programa
cultural
Este tipo de programas, pese a su
importancia y necesidad de existir, no acostumbran a tener mucha audiencia.
Ejemplos de este género serían los dedicados a arte, crítica literaria,
asesoramiento médico,…
- Radio
servicio
Se refiere a todos aquellos
mensajes, espacios o programas que rinden una utilidad inmediata, práctica a
los oyentes, y que pueden ser incluidos en todos los géneros anteriores.
Por ejemplo: avisos de socorro,
la hora, información meteorológica, cartelera de espectáculos, resultados de
lotería, publicidad, consejos prácticos, información de carreteras, alerta y
comunicación pública en casos extraordinarios.
El lenguaje radiofónico dispone de cuatro elementos sonoros
esenciales: la palabra, la música, efectos de sonido y silencios.
A.
La Música
La música es utilizada en un
amplio abanico de posibilidades:
- como factor de ambientación de una época o de una localización específica (Ej. coros del ejército ruso en noticia de Rusia)
- como caracterizador de personajes y secuencias (Ej. jota aragonesa en la narración de Agustina de Aragón)
- como fijación del ritmo de la narración (Ej. fondo de los titulares informativos)
- como definición psicológica de secuencias (Ej. b.s.o. Rocky en noticia deportiva)
- como elemento de sutura, encadenamiento y transición (Ej. secciones de programas)
- como elemento protagonista en sí mismo presentándose en primer plano
Tipos de transiciones
B.
Los efectos
Los efectos especiales utilizados
en la radio pueden simular un sonido real (campana) o tener un significado en
el contexto de un programa (pi pi piiii como señal horaria).
- Efecto – es utilizado en informativos y es una grabación de pocos segundos, que se emplea para separar noticias o bloques de información.
- Ráfaga – es un efecto más extenso, más complejo y que encadena sonidos o acordes musicales, y que se emplea para separar bloques de información pudiéndose grabar en primer plano indicativos.
- Indicativo – permiten al oyente identificar la emisora.
- Careta – para identificar un programa de una emisora
- Cortina – fondo musical que se utiliza para la lectura
C.
Los silencios
A quien comienza en la radio se
le suele explicar que es preciso evitar los silencios, frutos del error, de la
duda o de la confusión. Sin embargo los silencios pueden ser utilizados como:
- Función narrativa: El silencio puede servir para expresar lo que sucede en un fuera de campo sonoro
Ej.: Mientras tanto Juan informaba
de todo a sus amigos (silencio).
- Función descriptivo: Permite expresar ideas y sentimientos:
Ej.: El rostro de la mujer
expresaba el terrible dolor de la muerte (silencio).
- Función rítmica: El silencio puede servir para apoyar el ritmo de una acción.
Ej.: Poco a poco (silencio) (pasos
del personaje) Juan se aproximó al lecho (silencio) donde permanecía inerte
(silencio) el cuerpo sin vida de Ana (silencio).
- Función expresiva: el silencio puede aportar dramatismo, ambigüedad, expectación, etc.
Ej. De repente, todo parecía
adquirir un nuevo significado para Juan. (silencio)
- Función reflexiva: el silencio es utilizado para suscitar la reflexión en el oyente. El silencio informativo es empleado frecuentemente por los periodistas, en los espacios de opinión, para suscitar la reflexión del oyente.
- Función de pausa: El silencio puede funcionar como signo de puntuación.
Ej. Las noticias recibidas
provocaron un fuerte impacto en sus amigos. (silencio) días más tarde,...
- Otras funciones: silencio como error. Frecuente en el manejo de los equipos, se interpreta este silencio como un fallo técnico.
D.
La palabra
Escribir para que otras personas te oigan significa
escribir utilizando palabras que la gente escuchará pero no podrá leer. Por
ejemplo, cuando escribes guiones para la radio o la televisión, o cuando
escribes una presentación oral para leer en una clase.
Al escribir algo que otros oirán, debes recordar algunas
pistas importantes: ¡Los oyentes no tienen una segunda oportunidad para oírte!
Los lectores que no entienden algo de lo que están leyendo pueden volver al
inicio y leerlo otra vez. Pero los oyentes no pueden hacer lo mismo, deben
entender tus palabras la primera vez que las dices, ¡O tu mensaje se perderá en
el aire para siempre!
Consejo nº 1: Escribe como
hablas
En realidad, “casi” como hablas. Sin tacos y cuidando que
sea un lenguaje apropiado. Oye a los anunciantes y presentadores de noticias en
radio y televisión y notarás que los mejores son los que parecen tan naturales
como si estuvieran hablando contigo, no leyéndote sus guiones. Entonces, si
escribes algo que cuando recitas en voz alta suena como si lo estuvieras
leyendo, eso no es correcto. Por ejemplo, lee estas dos frases en voz alta.
¿Cuál de ellas te suena mejor, como si una persona simplemente estuviera
hablando?
- “En la escuela los niños pueden adquirir conocimiento
sobre el medio ambiente”.
- “Los niños pueden aprender sobre el medio ambiente en la
escuela”.
La segunda es la más adecuada para un guión de radio.
Consejo nº 2: Escribe
oraciones cortas
Es mejor escribir dos oraciones simples que una larga y más
compleja. Es difícil para los oyentes recordar al final de una frase larga lo
que habías dicho al principio. Y recuerda, no pueden volver al inicio para
releer tu oración. Por ejemplo, esta es una oración muy larga para oír, seguida
de otra que está mejor escrita y da la misma información al oyente haciéndola
solo en cuatro oraciones cortas.
-“Mi abuela, que se fue a América cuando era niña, me ha
contado ayer que aún se
acuerda de la primera vez que vio la Plaza Mayor, que la
hizo llorar, pero no estoy muy
seguro por qué”.
Esta es una mejor manera de escribir la misma información
para el oyente, haciéndolo en cuatro frases cortas:
-“Mi abuela se fue a América cuando era niña. Ayer me ha
contado que aún se acuerda
de la primera vez que vio la Plaza Mayor. Ella me dijo que
la hizo llorar. Pero no estoy
muy seguro por qué”.
Consejo nº 3: No utilices
palabras largas cuando las cortas serían igual
Es bueno que sigas aprendiendo palabras nuevas y ampliando
tu vocabulario. Pero en este caso, es más claro para los oyentes si usas
palabras simples y dejas las más difíciles para cuando hagas una presentación
escrita. Por ejemplo, suena mejor decir:
-“Maria manifestó que le gusta mucho el chocolate”
-“María dijo que le gusta mucho el chocolate”.
En la frase, la forma “dijo” que le gusta mucho el
chocolate funciona tan bien como la
palabra larga “manifestó”.
Consejo nº 4: Usa la forma
activa de los verbos
En la lengua española existe la forma activa y pasiva de
los verbos. El activo es más
adecuado para los oyentes, es más claro, más directo, y más
fácil de entender.
Por ejemplo, una frase con verbo pasivo:
-“Mi clase fue visitada por el director de la escuela”.
¿Quién hizo la acción? El director de la escuela. ¿Qué
hizo? Visitó. ¿Qué visitó? La clase. Pero sería mucho más simple para un oyente
si se lo dijeras más directamente:
-“El director de la escuela visitó mi clase”.
Es una oración corta y directa. Visitó es un verbo en forma
activa.
Consejo nº 5: Ten cuidado con
los “sonidos similares”
Son aquellas palabras que los lectores pueden diferenciar
al leer pero los oyentes podrían confundirse. Tu escrito puede estar bien en
papel pero sonar mal en la radio.
Consejo nº 6: Lee lo que has
escrito en voz alta
Es la única manera de oír cómo suenan tus palabras. Cuando
lees en voz alta, puedes oír los problemas que tus ojos no notarán al leer,
como frases que son demasiado largas, o trabalenguas (palabras con sonidos
difíciles de pronunciar).
-“Rápido ruedan las ruedas”.
Otras veces sin darte cuenta puedes escribir palabras que
finalizan de la misma manera y producen el efecto de rima que suena mal al
oído. Debes evitar frases que suenen como ésta:
-“En medio del evento, se escucharon palabras de lamento,
por el mal juego de
un equipo lento”.
Una buena idea es grabar tu voz en una cinta para oír tu
mismo como suenan tus palabras. Recuerda que tu apariencia en la radio no es lo
más importante. En cambio, ¡Cómo suena tu voz sí importa!
Consejo nº 7: Resalta lo más
importante de tu guión
¿Qué guión? Todo lo que tú escribas para leer en voz alta
es un guión. Y ésta es una idea para ayudarte a practicar la lectura de tu
guión. En cada frase que escribas, habrá algunas palabras que quieras destacar
diciéndolas más alto o con más energía. Los locutores profesionales y presentadores
de televisión subrayan estas palabras para acordarse de enfatizarlas al momento
de decirlas. Y también hacen otro tipo de señales en el escrito para recordar
cuando quieren hacer una pausa, o donde creen que necesitarán respirar. Tú
también intenta subrayar tus escritos, te ayudará a acordarte de cómo quieres
que suene tu voz cuando leas en voz alta.
El guión es el instrumento que sirve para planificar
cualquier programa radiofónico y, especialmente, para prever todo el material
sonoro que será necesario para su producción. En el guión se detallan, por
tanto, todos los pasos a seguir y, en función del programa al que nos vayamos a
enfrentar, será más o menos exhaustivo.
El guión es la pieza clave para que locutores y técnicos de sonido se
entiendan y sepan qué es lo que configura un espacio en cada momento.Según la información que contienen hablamos de guiones literarios, guiones técnicos y guiones técnico-literarios, siendo éstos últimos los más completos.
- Guiones literarios: Son aquellos que dan una importancia fundamental al texto que deberá leer el locutor o los locutores. Excluyen las anotaciones técnicas relativas a planificación, figuras de montaje, etcétera, y en él solo se señalan, generalmente en mayúscula, los lugares en los que aparecen músicas y efectos sonoros.
- Guiones técnicos: A diferencia del anterior, en este tipo de guiones imperan las indicaciones técnicas, mientras que el texto verbal sólo aparece a medias y, en algunos casos, ni siquiera eso. De hecho, lo que van a decir los locutores se expresa en forma de ítems (locutor 1: entrada noticia; locutor 2: cuerpo noticia, locutor 1: despedida, etcétera), como si se tratase de una simple pauta. Este tipo de guión es el más usado en la radio actual, sobre todo en programas informativos y magazines.
- Guiones técnico-literarios: Son los que contienen toda la información posible. En ellos aparece el texto verbal completo, así como el conjunto de las indicaciones técnicas.
·
Guiones Abiertos: están concebidos para
que puedan ser modificados en el transcurso del programa, por lo que presentan
una marcada flexibilidad.
- Guiones Cerrados: no admiten modificación alguna. Trabajar con uno u otro dependerá de la complejidad de la producción y, sobre todo, de las características del espacio.
Tipos de planos sonoros:
1. PRIMER PLANO: La fuente sonora está junto a nosotros.
Otros autores le llaman también "plano íntimo" o "primerísimo
plano" para expresar su fuerza dramática (se habla pegado al micro,
susurrando)
2. PLANO NORMAL (PLANO MEDIO): La fuente sonora aparece con
una presencia normal, situada entre 10 y 20 cm. del micrófono.
3. PLANO GENERAL (PLANO LEJANO): La fuente sonora se halla a
cierta distancia de la toma de sonido y, por tanto, del oyente (mas de 20 cm.)
4. PLANO DE FONDO (SEGUNDO PLANO): Se trata de sonidos que
suenan siempre en la lejanía respecto a una fuente de sonido que oímos en
primer término
TIEMPO
|
FUENTE
|
PLANO
|
INDICATIVO
|
OBSERVACIONES
|
Después
de una instrucción permanente, una actualización noticiosa y una íntima amistad con el diccionario, toda persona que
desee ser un buen locutor deberá hacer ejercicios graduales pero constantes.
Para
el efecto, es importante atender algunas recomendaciones que le serán de gran
utilidad para el dominio del lenguaje oral.
a) Descubra
sus defectos
La
autocrítica es el primer paso de la superación. El oído será el mejor juez de
su voz y de su dicción. Tome una grabadora y registre tres minutos de lectura
de noticias, tres minutos de lectura de un libro, tres minutos de charla
improvisada sobre cualquier tema, dos minutos de narración imaginaria (puede
ser deportiva, dos minutos de animación de un espectáculo artístico supuesto,
un poema y una canción.
Al
grabar y al escucharse descubrirá lo esencial: dónde están sus mayores
dificultades, dónde se oye mal.
¡Vamos
a superar esos fallos! (Guarde esa grabación como un recuerdo). Pero, por
favor, tenga mucha PACIENCIA. No se hace locutor en un día.
b)
Ejercicios
de respiración
Lo
primero, es la sugerencia de cambiar la idea de no tengo buena voz por no sé
respirar correctamente. El aire es la
materia prima de la fonación
¿Se
cansa al leer mucho en alta voz? ¿Su voz es débil? ¿Le sale temblorosa, le
falta firmeza?
A
lo mejor le falte el aire. La única solución a estas deficiencias está en
aprender a respirar correctamente. La respiración correcta se denomina
DIAFRAGMATICA, porque depositando el aire en el abdomen se logra que el músculo
diafragma sea el soporte y la catapulta del aire que hará vibrar sus
cuerdas vocales.
Aspire
profundamente y mida el tiempo que puede leer hasta necesitar aire nuevamente,
o, también, prolongue una vocal (Ej. aaaaaaaaaaaaaaaaaa ... ) y cronometre su
duración hasta que se quede sin aire. Probablemente serán 10, 15 o 20 segundos
los que duró su aire.
Esto
quiere decir que no entró suficiente aire porque no hemos acostumbrado a
nuestro reservorio (músculos abdominales y pulmones), a acumularlo. A esta
falta de costumbre o de ejercicio, se debe que cuando aspiramos profundamente
en un campo abierto tenemos sensación de ahogo. Entonces, entrenemos nuestro pecho
para la respiración abdominal:
Por la nariz, aspire lentamente, cuidando
de que el aire que toma empuje los músculos del abdomen. Sienta cómo su
estómago tiende a levantarse. Usted no solamente está llenando sus pulmones
sino también la cavidad abdominal. Luego, también lentamente, expela el aire
como si estuviera soplando suavemente.
Claro,
cuando suelte el aire, su estómago se irá desinflando. Se recomienda hacer esta práctica (con toda seriedad) diez veces
en la mañana y diez veces en la noche, durante siete días. Poco a poco usted se
dará cuenta de que su caja toráxica pide o está más dispuesta a recibir mayor
cantidad de aire.
Estas
respiraciones abdominales deben ser profundas y lentas. Nada ganará con
ejercicios bruscos. Siempre practique en posición de pie, levantando
moderadamente la cabeza, soltando los brazos y sin tensiones musculares. Para
hacer las prácticas de respiración siéntase tranquilo y relajado. Cuidado
especial: cuando respire, no levante el pecho ni los hombros.
En la segunda semana, aspire en la forma
indicada (sintiendo como se llena su cavidad abdominal) y, luego de la
aspiración profunda, detenga el aire introducido (10 segundos) y luego suéltelo
soplando lentamente.
Esto
realice diez veces en la mañana y diez, en la noche, durante una semana. Al
principio le puede parecer un poco cansada esta práctica, pero, poco a poco, su
organismo se irá acostumbrando a respirar correctamente e irá descubriendo que,
efectivamente, sí podía más.
Con
estos simples ejercicios, usted ya va conociendo la técnica de la respiración
abdominal o diafragmática. En la tercera semana ya vamos a aprovechar esa
respiración para administrar mejor el aire y transformarlo en sonidos.
Para ello, al expeler el aire, en lugar de soplar
lentamente, emitiremos el sonido de la letra u, de manera continua, sin cortar
la salida del aire: uuuuuuuuuuuuuuuuuu
...
La
emisión del sonido debe ser suave, muy débil, para no gastar aire. Se
recomienda la letra u porque la posición de los labios para pronunciarla evita
que derrochemos aire. Así empezamos a ejercitar una mejor administración del
aire y el control de los múltiples músculos que intervienen en el lenguaje
oral. No se preocupe si al principio le sale la letra uuuuuuuuuuu ... un poco
temblorosa o con variaciones.
Precisamente,
eso le demostrará que aún no domina
la "salida del aire", porque,
mediante el ejercicio continuo, sonará uniforme y firme. En realidad podríamos
comparar nuestra expulsión de aire con una llave de gas o de agua. Podemos
regular la salida del agua, abriendo la llave para que salga un chorro fuerte y
grande, o cerrándola, para que salga un chorrito débil y delgado, pero
uniforme.
Así,
nuestros sonidos pueden salir fuertes o débiles, dependiendo de la cantidad de
aire que utilicemos en su emisión y de la técnica que utilicemos para
fortalecer los músculos correspondientes.
A partir de la cuarta semana, y con el
mismo ritmo de práctica, realice aspiraciones profundas y emita sonidos con
diferentes vocales pero variando la intensidad; es decir, unas veces
haciéndolas sonar fuerte y otras muy débiles.
Obviamente,
cuando produzca sonidos fuertes, el aire se le terminará más rápido; pero, así
aprenderá a dominar su salida y a conocer variaciones de modulación.
En la quinta semana, entramos a la
diferenciación de sonidos nasales: con el mismo aire, en vez de vocales,
pronuncie las letras m y n. Para el efecto, aspire profundamente, haga sonar
mmmmmmmmmmmm... y nnnnnnnnnnnnnnnnnn.... alternadamente en cada
respiración. Ponga especial atención a la repercusión de esos sonidos en toda
su cabeza. Sienta como toda ella vibra. Notará que el aire sale por la nariz
cuando dice mmmmmm... o nnnnnn... y que resuenan en su cabeza.
Compruébelo
tapándose un segundito la nariz. Cada vez, trate de que esos sonidos se
escuchen más fuerte.
Luego, mezcle esas consonantes con vocales. Por ejemplo:
nnnnnnnnnnnnaaaaaaa ...
nnnnnnnnnnnneeeeee ... (imite un mugido)
mmmmmmmmmmmmmmmuuuuuu .... etc.
A
estas alturas de la práctica, ya no tiene que respirar diez veces en la mañana
y diez en la noche, sino que usted mismo se irá imponiendo un exigente ritmo de
práctica, que no lo lleve al agotamiento pero que le ayude a dominar la emisión
de sonidos fuertes y débiles. En este momento
por su seriedad, constancia y disciplina la, calidad y fuerza de sus sonidos
será mucho mejor que hace un mes. Sin embargo, estamos comenzando...
Ya
puede tomar más aire y se está fortaleciendo esa membrana llamada diafragma. Ahora
usted, gracias a su respiración, podrá sentir la diferencia entre lo que es
gritar y lo que es hablar alto. Cuando grita, está irritando su garganta y
forzando sus cuerdas vocales. En cambio, cuando habla en alta voz, solamente
está utilizando mejor su aire y
proyectando más el sonido.
Para proyectar o colocar mejor su voz vienen
estos ejercicios: procure que el sonido producido por el paso del aire
por sus cuerdas vocales, haciéndolas vibrar, choque y resuene en su paladar y
salga fuerte, claro y sonoro, hacia fuera. Practique cantando alguna frase
musical.
Levante su cabeza para que el sonido pueda salir entero.
Imagínese que está enviando su voz a una cierta distancia (por ejemplo a 5
metros) y que debe llegar hasta allá con todo su fuerza y claridad. Luego, imagínese que su voz debe
llegar a 10 metros y procure que llegue directa, nítida y fuerte.
También
es bueno alternar variando el volumen; es decir, en otro momento cante muy
bajito (piano) como si cantase al
oído de una persona. Pero siga sacando su aire correctamente, continúe con la
respiración diafragmática y solamente reduzca la intensidad de su expulsión de
aire. Sólo debe variar el volumen. Pero, cantando fuerte o piano, se debe
escuchar igual, esté muy cerca o a distancia.
Finalmente,
otro ejercicio para controlar o administrar la salida de su aire: Tome una vela
encendida y cerque sus labios a unos cuatro o tres centímetros de la llama (sin
quemarse, por favor) y pronuncie prolongadamente la letra u. El sonido (aire)
debe salir muy despacio. La práctica está en no apagar la llama. Desde luego,
esto se conseguirá si domina, regula o administra su aire, porque si expele muy
fuerte, apagará la llama.
Haga
este ejercicio cuantas veces sea necesario hasta que diciendo:
uuuuuuuuuuuuuuuuu... muy cerca de la llama, no la apague. Otra vez la
comparación: así está aprendiendo a controlar la llave de aire. Insista en todos los ejercicios que hemos visto y alterne
pronunciando frases o cantando un poco, una vez suave y otra vez fuerte.
Y
si desea una autoevaluación diaria, pruebe con este ejercicio: respire y diga:
"Gracias a mi gallina ponedora, los huevitos no me faltan. Diariamente
tengo uno, tengo dos, tengo tres, tengo cuatro, tengo (así, continúe hasta que
le alcance la respiración). El éxito estará en que cada día tenga más huevos...
Esa será la mejor prueba de que está respirando más y mejor. Usted puede.
c)
Ejercicios de vocalización
Común
error en algunos locutores es la supresión o la alteración de letras y sílabas
en las palabras. Esto obedece a una mala vocalización o articulación de los
sonidos. Solemos justificamos de mil maneras: leí muy rápido, está oscuro el texto o estoy nervioso, etc. ¡Falso!
La única verdad es que sus músculos faciales no están bien
entrenados para articular correctamente los sonidos. Faltó concentración.
Sí. Porque hablar no solamente es emitir sonidos y mover
la lengua. Cuando habla o canta interviene todo su cuerpo. Su voz es el final
de un proceso en el que cuenta desde la manera de pararse o sentarse hasta la
posición de su cabeza, etc. En la
correcta emisión sonora, con sus cuerdas vocales vibra todo su cuerpo, se
proyecta su personalidad. Sin embargo, de manera especial actúa su mecanismo de
fonación: sistema respiratorio, diafragma, cuerdas vocales, garganta, lengua,
maxilares superior e inferior; dentadura y labios.
Todos estos órganos juegan su rol. Por eso se altera
nuestra pronunciación cuando nos lastimamos la lengua, un labio, nos falta un
diente o estamos afónicos. Su locución debe guardar pureza en cada una de las
expresiones.
Debemos corregir esos errores de cambiar el sonido de las
letras o saltarnos su pronunciación. Por ejemplo, solemos decir “peliar” por
pelear; “genral” por general; “nunkintesteso” por nunca- intenté eso; “cama,
damichocolate” por cama dama y chocolate o, “pase diaño” por pasé de año, “dame
majagua”, por dame más agua...
Abra
la boca (todo lo que pueda), manténgala así unos diez segundos y vuélvala a
cerrar. Estos bostezos repítalos
cinco veces en la mañana y cinco en la noche, durante cinco días. Sin
exagerar... sin exagerar. (Podría quedarse con la boca abierta).
Al principio puede doler un poco a los lados de la
cara. No se preocupe, sólo es la falta de costumbre y de entrenamiento
muscular.
Luego,
dedíquese unos 30 días a las vocales, los diptongos y triptongos. Esfuércese
por una pronunciación clara, precisa y sonora. Que cada letra suene limpia. Ejercite las veces que pueda.
Primero las vocales separadas: a - e -
i - o - u.
Luego cada vocal en forma prolongada e
intermitente (cortada): “aaaaaaaaaaaa a - a - a - a- a - aaaaaaaaaaaa a - a- a
- a- a - a - a - a " "eeeeeeeeeeee e - e - e - e - e e - e - e
eeeeeeeeee... etc".
Seguidamente,
combine las vocales; ligándolas: "a - i - o
aaaaaaaaaaaiiiiiiiiiiiiaaaaaaaaaaaa a - i - a e - u - e eeeeeeeeeeee
uuuuuuuuuuuueeeeeeeeeeee e - u - e".
Así,
combinando todas las vocales. Más adelante, practique diptongos cortados y
ligados. " a - e - áe áe áe aé a - e áe áe aé aé" En unas ocasiones
acentuamos la primera vocal, en otras, la segunda. "a - i ái ai...
etc."
Así,
continuaremos con ae ai ao au, ea ei eo eu, ia ie io iu, oa oe oi ou, ua ue ui
uo.
Posteriormente,
llegan los triptongos (tres vocales unidas). También pronúncielas separadas y
ligadas; variando los acentos: a - e - i áei aéi aeí (repita varias veces).
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaéiiiiíiiiiíiiiiiiiiiiii;
áeeeeeeeeeeeeeeiíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii
áeeeeeeeeeeeeeeeepeeiiiiiiiiiiilíiiiiíiii; aaaaaaaaaaeeeeeeeeeeeeeeeeí
Prosiga:
aea aei aeo aeu, aia aie aío aiu, aoa aoe aoi aou, aua aue aui auo, eac eai eao
eau, eia, eie eío eiu, eoa eoe eoi eou, eua eue eui euo, iae iai iao iau, iea
iei ieo ieu, ioa ioe ioi iuo, iua iue iui iuo, oae oai oao oau, oea oei oeo
oeu, oia oie oio oiu, oua oue oui ouo, uae uai uao uau, uea uei ueo ueu, uia
uie uio uiu, uoa uoe uoi uou.
No
pretenda hacer todos los ejercicios en un día. Dosifique su práctica. Nada
adelanta con precipitaciones. Escúchese, insista disciplinadamente, sea
constante y no se desanime. Recuerde que "muchos son los llamados y pocos
los escogidos". La diferencia está en la paciencia perseverante. Otros
estarán jugando o durmiendo; usted, continúe su propósito más firme que nunca.
No pierda tiempo pensando o dudando. Más pronto de lo que se imagina... usted
llegará a donde quiera llegar.
Continuemos:
ahora vienen las consonantes adelante: báe baé bái baí báo báo báu baú ..
CAE
CAI CAO CAU, DAE DAI DAO DAU, FAE FAI FAO FAU, GAE ... etc. Por último,
ejercite combinaciones especiales con triptongos y consonantes; por ejemplo:
TRIAI FLUOU GLIA, ÑEOE, etc. Mueva bien sus mandíbulas y sus labios para que no
se le escape el sonido fuerte y nítido de cada letra. Varíe los acentos.
También hay que fortalecer la
lengua. Para eso: saque la legua (lo más que pueda) y vuélvala a su posición
normal. Repita esto en la mañana y en la noche unas 5 veces. Utilicemos la
letra L y cantemos sólo con esa
letra:
"LLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLLL..."
Una
melodía en la mañana y otra en la noche, sólo con la letra 'ele'. Hoy, con la
R. Repita lo que dicen los narradores de automovilismo:
"Carrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrro a la vista"
La
pronunciación correcta de la letra r es muy importante para la locución
radiofónica. Desde luego, sin caer en exageraciones, debemos hacer vibrar
correctamente esta letra, especialmente cuando es doble (rr). La lengua y el
paladar tienen esa misión. Ayúdelos practicando esto. "R con R, cigaRRo; R
con R, baRRil. Rápido coRRen los caRRos, cargados, de azúcar, al
feRRocaRRil".
Otro ejercicio: silbe. Sí, silbe
bastante. Al fin y al cabo está expulsando aire y está dando una posición a sus
labios. Silbar ayuda a aflojar los labios y a controlar la salida del aire.
Lea o improvise, hable muy pausadamente,
lento... "masticando" las palabras, las sílabas y cada letra. Exagere
la articulación, la prO - nUn - clA - ci0n de cada sílaba. Si encuentra una
palabra o una sílaba difícil, con mayor razón, con más capricho insista en su correcta, clara y fuerte
pro - nun - cia - ción.
Aquí
recuerdo que a los señores estudiantes solía pedirles que graben 10 minutos
silabeando. Usted también puede hacerlo. Léase un párrafo sólo en sílabas. Por
ejemplo,
así:
"EL MAS GLO - RIO - SO HE - RO - IS - MO ES VEN - CER - SE A U - NO MIS - MO
A
estas alturas usted puede leer y memorizarse (es bueno ejercitar la memoria)
algunos trabalenguas populares. Esto ayuda mucho a la coordinación mental y a
la relación cerebro-lenguaje. Si no los tiene a mano, aquí están algunos con
los que puede practicar, inclusive ritmo.
Al comienzo silabéelos. Luego puede ir leyéndolos cada vez más rápido:
"Estando
la garza grifa con sus cinco hijitos garzos grifos, vino el garzo grifo a
engarzogrifar a la garza grifa; y le dijo ella: quita de aquí garzo grifo que
bien engarzogrifada estoy con mis cinco hijos garzos y grifos"
"Una
gallinita pinta, pipiripinta, pipirigorda, rogonativa, ciega y sorda tiene unos pollitos pintos,
pipiripintos, pipirigordos, rogonativos, ciegos y sordos".
"El
Arzobispo de Constantinopia se quiere desarzobispoconstatinopolizar; el que lo
desarzbbispoconstantinopolitarizare muy buen
desarzobispoconstantinopolitarizador será".
"Esta
noche vendrá el murciélago y nos
desnarizorejará; y el que lo desnarizorejare muy buen desnarizorejador
será".
"En
esta villa tres Pedro Pero Pérez Crespo había:
Pedro
Pero Pérez Crespo, el de arriba;
Pedro
Pero Pérez Crespo, el de abajo; y,
Pedro
Pero Pérez Crespo Crispín,
que
tiene una yegua y un potranquín.
Pero
yo no busco a Pedro Pero Pérez Crespo, el de arriba;
ni
a Pedro Pero Pérez Crespo, el de abajo; sino a Pedro Pero
Pérez
Crespo Crispíri, que tiene una yegua y un potranquín, crespa
la
cola, crepa la crín, crespa la yegua y el potranquín".
Y,
un último ejercicio para la vocalización que mencionaremos aquí, es el siguiente: entre los dientes, póngase un lápiz en
forma horizontal; muérdalo levemente y lea
así unos cinco minutos diarios (desde luego, sin soltar el lápiz). Algunos
ejercicios le causarán mayor dificultad o dolor que otros; pero, dígame: ¿qué
lección no duele?.
d)
Ejercicios de modulación
Bien
realizados, pocos ejercicios pueden ayudar a darle color y calor a
su voz. Pruebe con estos tres:
Lea un párrafo con voz natural (volumen regular); luego,
Vuélvalo a leer muy quedo (casi susurrando); y, después, léalo con
toda intensidad de voz. Proceda igual con frases musicales o con canciones.
Tome una poesía e interprétela: (dígala con sentimiento).
Inspírese y recite un poema con las
inflexiones de voz necesarias para captar su mensaje. Seguidamente, vuélvala a
leer; pero, esta vez, alternando el volumen de su voz: un verso piano y un
verso fuerte. También hágalo con canciones.
Tome diversas frases interrogativas (?), admirativas (!) y
de suspenso ( ... ). Léalas o dígalas
con el sentido que indican los signos respectivos. Por ejemplo:
¡Basta.
Detengamos la injusticia!
La besó
apasionadamente, y, entonces...
¿Cuánto
tiempo hace que no besas a tu madre?
Esfuércese
por repetir frases similares, pero cada vez de diversa forma, con otra
entonación. Recuerde las connotaciones.
Como
otro ejemplo diré que usted puede expresar muchas cosas con las mismas
palabras:
Qué
profesional.
¡Qué
profesional! (Admiración que aprueba la gran calidad)
¡Qué
profesional! (Admiración que critica la mala calidad)
¡Qué
profesional ... ! (Frase burlona)
¿Qué
profesional? (Pregunta a qué profesional se refiere)
¿Qué
... profesional? (Doble pregunta que expresa duda)
¿Qué
... profesional! (Pregunta y afirmación admirativa) etc.
Nótese
la variedad de connotaciones o sentidos que usted puede dar a una palabra
solamente con cambiar la entonación o modulación de su voz. Manos a la obra!
e)
Ejercicios de dicción
Más
allá de la vocalización (articulación), la dicción se refiere a la forma global
de expresión del idioma. En términos generales, a su locución.
A
pesar de que con los ejercicios de respiración,
vocalización y modulación, usted ha superado mucho su expresión, es
necesario puntualizar normas generales para mejorar la dicción.
No
importa que algunas recomendaciones sean reiterativas. En el aprendizaje
también: "lo que abunda no hace daño".
Lea diariamente, en voz alta, párrafos de
artículos selectos, poesías, fragmentos de narraciones, etc. Hágalo sin prisa.
¡Ojo! la prisa es mala consejera en la locución.
Con
la indicada práctica usted se familiariza con diferentes estilos de redacción y
se familiarizará con términos nuevos. Ponga especial énfasis en repetir las
palabras que le resulten de difícil pronunciación.
Cuando lea, hágalo de pie y levante el
texto a la altura de su cara (no incline la cabeza): respirará mejor.
Atención
especial: seleccione temas bien redactados, con los debidos signos de
puntuación y de preferencia, comience con frases cortas. Piense siempre que
está locutando ante un micrófono. Convénzase que es un buen locutor.
Tome un párrafo, de unas cuatro líneas.
Transcríbalo eliminando todos los signos de puntuación (comas, puntos, signos
de interrogación, etc.). Lea el párrafo sin los signos de puntuación
(lógicamente no encontrará sentido) y, luego,
vuelva a decirlo pero poniéndole mentalmente los signos.
Esta
puntuación imaginaria le exigirá que dé sentido a lo que esta leyendo.
Improvise una charla de dos minutos sobre
cualquier tema, y, grabe esa
improvisación. Escúchese y analice
en qué tropezó. ¿Argumento?. ¿Énfasis? ¿Conocimientos? ... ¿qué faltó?
A
lo mejor le parecieron muy largos los dos minutos; o no pudo coordinar bien sus
ideas, o no se acordó más... Ahora que ya reflexionó, tome un papel y escriba
una sinopsis brevísima de lo que dijo y lo que pudo haber dicho en su
improvisación.
En
esa sinopsis, seleccione y ordene los cinco subtemas principales.
Ahora
sí, vamos nuevamente a improvisar la
charla de dos minutos sobre el mismo tema. Se dará cuenta de la diferencia que
existe entre improvisar sin un esquema mental e improvisar con el cuadro de
referencia.
Con
esto, demostramos la importancia de organizar las ideas antes de exponerlas en
una improvisación.
Siempre que deba improvisar, trace mentalmente un cuadro
sinóptico de los cinco puntos básicos, poniendo énfasis en el primero y el
último. (Eso le dará confianza en usted mismo). Exponga sus ideas en orden y sin precipitación. Si habla de prisa
se le agotará el tema pronto y puede
tener tropiezos. Tampoco debe exagerar la lentitud de exposición. Improvise con
un ritmo natural y voz convencida.
(Eso demostrará conocimiento, serenidad y firmeza). Recuerde que entre los oradores, los mejores improvisadores son los que
jamás improvisan.
De vez en cuando, trate de imitar a buenos
locutores. Esta sugerencia no es para que plagie estilos, sino para que compare
las entonaciones, la velocidad o el ritmo, los énfasis; y, sobre todo, el sentido que dan a sus lectura o diálogos.
Lea
mucho (buenos textos); escuche mucho (buenas locuciones), y, calle mucho (no presuma de aprendiz de locutor). Entre sus lecturas se
encontrará con nombres extranjeros cuya pronunciación le sea difícil o
desconocida.
Los
malos locutores acuden a un recurso detestable: omiten esas palabras o las
mascullan gangosamente, creyendo que engañan a sus oyentes (? ¡)Usted jamás
hará lo mismo; pues, aquí están algunos recursos para las diversas
circunstancias y posibilidades:
Aunque
es recomendable que el locutor conozca uno o dos idiomas diferentes al suyo,
esto no es frecuente. Por lo tanto, será conveniente que usted averigüe
siempre, antes de locutar, la pronunciación correcta de las palabras
desconocidas y las escriba (como suenan) para que su expresión sea segura.
Escuche
emisoras internacionales y familiarícese su oído a la musicalidad de otros
idiomas o a la pronunciación de los nombres de personajes que están "de
moda" en la noticia internacional. Por último, recuerde que algunas formas
elementales de pronunciación extranjera pueden ser de su utilidad alguna vez.